En las últimas
semanas, las acciones del pueblo en lucha han conducido a crear dos escenarios
claves de conflicto que como sistema de comunicación revolucionario nos
proponemos como base de nuestra línea editorial por estos momentos. La lucha de
los trabajadores por profundizar el control obrero en diferentes empresas, y la
disidencia y rebelión del pueblo bolivariano frente a las candidaturas
impuestas para alcaldes.
El
funcionamiento de varias empresas −nacionalizadas por la lucha de los
trabajadores− debe constituirse dentro de la demanda de control obrero. Sin
embargo actualmente este control obrero convive con la imposición de gerencias
desde el poder ejecutivo, situación que en algunos casos es con acuerdo de los
trabajadores, y en otros no.
Desde hace
algunas semanas en Aceites Diana, una joya productiva de este proceso, se
cambió la gerencia y se nombró a un gerente con un ya conocido historial de
corrupción, de creación de empresas de maletín, y de arremeter contra los
trabajadores en cargos anteriores. Frente a este nuevo gerente los trabajadores
iniciaron una jornada de protestas denunciando la situación, pero más allá de
los problemas particulares de Aceites Diana, esto puso nuevamente la discusión
y la lucha por el control obrero en la realidad de los movimientos de
trabajadores. El ejemplo de lucha del consejo de trabajadores de Diana impulsa
nuevas luchas como la de los trabajadores de Briqven y de las Cementeras nacionalizadas,
y re-visibiliza luchas que comenzaron hace unos años en Sacosal, el Centra
Azucarero de Cumanacoa, la situación de
boicoteo de la burocracia a las experiencias de control obrero como la de La
Gaviota, experiencias como la de Alcasa CVG, etc.
Este nuevo
proceso de lucha, que por cierto inicia después del Congreso de Trabajadores
por el Control Obrero que se realizó a finales de junio, es clave para poder
construir la base de una sociedad libre, una producción libre y en manos de sus
trabajadores, como se afirmó en dicho congreso: ¡Sin Control Obrero no hay
revolución!. El control obrero es un legado del pueblo en lucha y del proceso
revolucionario bolivariano que los trabajadores vienen defendiendo y
profundizando.
Como Sistema
Libre y Militante La Guarura debemos producir contenido comunicacional que
recoja la expresión de lucha desde sus mismos voceros, y que difunda y
profundice sobre la necesidad del control obrero.
En un segundo
bloque de esta línea editorial, es importante recoger las voces de disidencia y
rebelión que han surgido desde la imposición de las candidaturas para alcaldes
por la dirección del PSUV. En varias regiones del país el pueblo bolivariano se
ha pronunciado y se han registrado protestas en rechazo a estos candidatos. Se
pueden especificar las protestas en Guarenas-Guatire, Barlovento, en el Estado Lara especialmente el caso de Sanare (revisando lo que ha sido el papel de la
Radio Sanareña como voz de este conflicto) en el Estado Trujillo, Apure y Sucre
específicamente el caso de Cumanacoa. Este nuevo conflicto es de gran
importancia para el proceso revolucionario puesto que es la rebelión en contra
de las prácticas anti-democráticas que vienen surgiendo y que son necesarias
confrontarlas inmediatamente como de hecho lo hace nuestro pueblo. Debemos
igualmente producir contenido comunicacional que exprese estas luchas, (contando
como ejemplo el editorial que sacó la Radio Sanareña 101.9 FM, publicado en el
sitio web aporrea) en el contexto de la necesidad de la profundización de la
primera bandera de este proceso: la democracia participativa y protagónica.
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