Por Javier del Valle Monagas Maita (*)
No es una novedad. Ese asunto de los hermanos, padres, y
otros familiares que pretenden sacar provecho de un cargo público ocupado por
un familiar cercano. Es la practica cuasi obligatoria de los oportunistas, que
creen que porque un familiar, amigo o, ser cercano, ocupa una posición política
importante, tienen el derecho y la obligación de ser beneficiados materialmente
de los influencias de ese cargo, para ellos o sus amistades. Es la continuación de derrape
saqueador de la cuarta república. En esa maldición, el país ha sufrido las
consecuencias, no sé si cómplices o no de funcionarios de confianza de Chávez
como: Rafael Isea, o el ex ministro Jesse, Chacón Escamillo, Mario Isea, al
frente del Banavih y que sorpresivamente fue premiado con una embajada en
España, Entre muchísimos otros ejemplos. Por culpas de sus hermanos, hijos,
tíos, sobrinos, queridas… los cuales se han valido de influencias familiares
para estafar al proceso. Pero estemos claros, esa delincuencia de cuello
mugroso no es nada más de los funcionarios del proceso. Abunda más y es
hasta una práctica común en la llamada oposición y sus líderes destacados,
empezando por Henrique Capriles Radonski, y su padre. O María Corina Machado y
su tío el ladrón, Guillermo Machado Zuloaga. O, Leopoldo López y su madre, la
estafadora y ladrona de
PDVSA Antonieta de López. Estafadora
que sacó unos dineros de la empresa petrolera en los tiempos de la cuarta
república, para financiar un partido político para su hijo el drogadicto y
criminal: Leopoldo López y un grupito de desadaptados sociales y fascistoides
delincuentes de "high" élite explotadora.
Pero no causa extrañeza en
Venezuela, que esas cosas pasen en la derecha de AD, COPEY, PRIMERO JUSTICIA
o la MUD. Así ha sido desde que se instauró la dictadura de
la derecha desde 1958, apoyados por USA y cabalgada por los empresarios
parásitos venezolanos y extranjeros. Más,
si es enojosa en los círculos de poder y políticos de la revolución.
Debo decir sin ningún temor a equivocarme que parte
de la culpa de esa corrupción “revolucionaria” está en los más altos círculos
del poder, aun en tiempos de vida del entrañable camarita Chávez, hasta
hoy. Y es que los soplos de
soberbia y prepotencia hacen que esos círculos de poder desprecien y desoigan
las voces de alerta del pueblo. Incluso en cámara Maduro va hoy por esa
zenda. Desde el pueblo
hemos detectado y denunciado esos actos de corrupción y de los corruptos, pero
no se nos para bolas. Así
pasó desde Miquilena hasta Ismael García, pasando por Eladio Aponte Aponte, Velázquez
Alvaray, entre muchísimos otros casos denunciados. Así mismo se impone la
soberbia y la prepotencia cuando se desoye la voz popular que exige la
liberación de un inocente hombre de batalla por los débiles, como Julián
Conrado, o el respeto a las tradiciones, de los pueblos indígenas contemplados
en la CRBV. la devolución de sus tierras arrancadas a sangre y fuego por la
terrofagia narco terrorista y generadora de sicariato en la goajira, en el
encarcelamiento de los asesinos de Alexander Fernández y Sabino Romero, cuyos
autores fueron identificados por las propias víctimas antes de morir http://www.noticiascentro.com/ 2013/pagaron-mucho-dinero- para-matarme-revelo-sabino- romero-en-noviembre-pasado/. En casi todos esos casos de denuncias,
lo que se ha obtenido como respuesta de principio es el descalificativo y la
denigración de quienes denunciamos. Lo que hace ver que es mentira el respeto
hacia la voz popular aliada del proceso.
El pueblo y sus medios sólo contamos,
cuando se nos necesitan para hacer bulto. Pero nuestras denuncias y nuestras
proposiciones son soslayadas. Aún
está muy lejano el poder popular ¿Quizás por eso los Consejos Comunales están
tan desvirtuados y alejados de sus verdaderas funciones? Es más, cuando empieza
a cuajar, le echan agua y destrozan lo avanzado, como es el ejemplo de
INDUSTRIAS DIANA, tan solo por nombrar una entre tantas, o las fabricas de conserva de sardinas en
manos del sector obrero, a los cuales les viven poniendo zancadillas y el alto
gobierno mira para la luna. Y miren que no nombro el frenazo a Samán en dos
diferentes oportunidades. Yo no escribo para atacar, pero es mi responsabilidad
como un hombre más del pueblo denunciar lo que se ve, se siente y se oye en la
calle de la revolución y del proceso chavista. No por eso dejo de creer y seguir
siendo soldado de la revolución. Pero no podemos hincharnos de mentira y de
encubrimiento tan sólo por cubrir apariencias. Eso sólo lo pueden hacer los
cómplices o los que se creen avestruz. Están pasando cosas muy buenas en
Venezuela contra la corrupción, pero es necesario profundizar más y apurar a
los órganos de justicia para que sean de verdad órganos revolucionarios y que
se empiecen a atacar esos clanes de poder dentro de la justicia venezolana que
sigue existiendo y se han multiplicado ¿Cuándo se aplicará una constituyente
judicial, por ejemplo? Ojo,
que no estoy haciendo el juego a esa oposición enferma. No, ellos son los menos
interesados en una constituyente, ya tienen un amargo recuerdo de la del
1999. Pero insisto, en el
poder judicial corre el tráfico de influencias y el negocio de las decisiones
que juega garrotes. Sólo
vean el modus vivendi, las cuentas bancarias y los sueldos que se ganan los
funcionarios. Verán que no hay correspondencia y no puede el kino, ser tan
dador de premios a un sector exclusivo del país…
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