La Guarura Impresa #2

La raíz Caribe hace sonar las Guaruras


El sentido común que nos mantiene unidos a la justa lucha de Sabino Romero y que hoy nos hace reconocer en él y en los suyos el más cercano símbolo de resistencia indígena nacional, tiene su seno en la raíz Caribe que nos empuja hacia la voluntad colectiva de la voz punzante y del puño enérgico en la revuelta necesaria. Fue ese mismo sentido común el que logró movilizar a las bases populares de todo el país en aras de consolidar el triunfo electoral de Hugo Chávez en la presidencia el 7 de octubre pasado; el mismo que ha venido forjando la conciencia de clases que logra romper con aparatajes electoreros, burlar frívolas campañas y sobreponerse a la rabia de reconocernos en participación truncada, en pos de una esperanza del hacer colectivo, emancipador y verdadero. No obstante este sabernos, hermoso y dinámico, insiste tercamente en imponerse desde el poder constituido, la majestad burocrática y corporativa de quienes pretenden acallar la lucha, robarnos la digna vida.

El dedo autocrático que impone los gobiernos amenaza con quebrar nuestra capacidad movilizadora y emerge entre nosotros la arrechera urgida de organización que está dispuesta a nombrar la traición, asentar las bases de otra política y hacerse cargo de las más genuinas prácticas de autogobierno. Somos pueblo en lucha y la que nos corresponde se agudiza cada día más en el marco de las contradicciones propias del ejercicio del poder por parte del estado.

El Sistema Comunicacional Libre y Militante La Guarura es capaz de comprender el reto que se nos presenta, por ello, ejerce su derecho al compromiso colectivo sin vacilar en la crítica, escapando de cualquier hipnotismo que atente contra nuestro decir verdadero, construyendo tejido vivo, vibrante y sonoro, formas de organización verdaderamente autónomas y capaces de ejercer el auténtico poder popular, libre de disposiciones jerárquicas propias del estado capitalista y burgués que nos corresponde exterminar. En ese camino, el camino de las comunidades, avanzamos con la certeza de que sólo siendo un mismo corazón palpitante, un conjunto orgánico abrazado a su raíz, lograremos construir otra política. La batalla que hemos ganado hoy al clamor de las guaruras garantiza la vida de Sabino, su lucha que es también la nuestra, su voz digna y emancipada capaz de hacer frente al estado que nos urge transformar. La lucha sin embargo continúa, seguirán sonando las guaruras hasta que haya tierra libre de minas y hacendados para todos nuestros pueblos indígenas, hasta que haya vida digna para todos y cada uno de nosotros.

Consejo Editorial La Guarura

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