sábado, 12 de octubre de 2013

Cianuro en gotas XIV



Nada nuevo se vio en la Asamblea durante la sesión en la que Nicolás Maduro solicitó poderes legislativos especiales. La oposición se condujo con la grosería y la mala educación que caracteriza a sus dirigentes. Tuvieron sus habituales pataletas y se comportaron como si en materia de corrupción fueran vírgenes vestales y no curtidas ladronas. Julio Borges mostró una vez más que es un patán que se siente aludido cada vez que señalan la corrupción de su partido, como cuando mencionaron a Oscar López Colina que es igualito a Borges y no sólo en lo ladrón.

Como es tradicional cada vez que se produce una petición de ley habilitante, la oposición miente descaradamente, vaticinando las peores catástrofes para el país como consecuencia de esa legislación. Pero también del lado chavista se cae en la exageración y se ve ese instrumento mucho más allá de lo que realmente es: un mecanismo que permite legislar mucho más rápidamente que si lo hiciera la Asamblea, órgano que, a diferencia del Ejecutivo –que por algo se llama así- está diseñado para largos debates. La habilitante va a ayudar en la lucha contra la corrupción y en la guerra económica, pero no es toda la solución de esos problemas, cuya única salida es una mano férrea contra choros de todo tipo.



Como señalábamos ayer, con la complicidad del Ministerio Público quieren dejar en libertad a las peores alimañas, a asesinos desalmados. Ya no se trata sólo de que estén libres criminales como María Lourdes Afiuni, Lázaro  Forero o José Sánchez, alias Mazuco. La derecha se mueve y suelta plata en la Fiscalía para que liberen nada menos que a los Guevara, autores materiales del homicidio de Danilo Anderson. Con la excusa de una leve enfermedad crónica, la misma hipertensión que padecen millones de venezolanos, quieren soltar a Rolando Guevara y así abrir el chorro para salgan sus hermanos y primos. Son sujetos de la peor estofa, indeseables capaces de realizar un atentado terrorista a cambio del dinero que les dio Nelson Mezerhane, banquero prófugo que tiene vara altísima en el ente supuesto a ejercer la vindicta pública. 

Las gestiones que realizan los defensores de los asesinos ante el venal Ministerio Público, persiguen dejar en libertad este mismo año a los peores criminales y terroristas. Ya andan sobornando para que suelten a estas lacras: Iván Simonovis, Rolando, Otoniel y Juan Guevara, Arube Pérez, Luis Molina, Héctor Rovain, Milton Revilla, Erasmo Bolívar y Marcos Hurtado.

Aunque el gobierno no ceja en la lucha contra la corrupción, faltan resultados visibles. Se requiere incluso golpes de efecto, que hagan ver al país que de verdad se combate ese crimen. Semanas atrás, el país vio con alivio la captura de peces gordos, como el Presidente de Ferrominera y un ex gobernador de Guárico. Sin embargo, otros golpes serios, aunque con ladrones no tan encumbrados, se vio en Guayana, donde encarcelaron por extorsionar a los trabajadores a un coronel y su sobrino. No obstante, ese hecho pasó casi que clandestinamente. Los medios privados ni lo mencionan y los públicos lo hacen tangencialmente, sin mostrar que hay una lucha a fondo contra los corruptos. Sería excelente que junto con la aprobación de la ley habilitante cayera un corrupto de muy alto nivel. Un ministro choro sería perfecto.


El Universal del martes 8 incluye una información, que de ser cierta, debería provocar el corte de varias cabezas. Según ese pasquín, que con mucha frecuencia miente, inventa, exagera o distorsiona hechos, en Puerto Cabello hay un buque fondeado desde hace ¡47 días! sin ser descargado. Se trata del Podlasie, que arribó a la bahía el 21 de agosto. Para más inri, ese navío viene con un gran cargamento de azúcar, para la Corporación Casa. Se trata de uno de los productos que escasean en el mercado nacional. Según la misma fuente, hay otras 12 grandes embarcaciones cargadas de alimentos esperando durante semanas a ser descargadas. De confirmarse que por una vez El Universal no mintió, debería llegar una ola de destituciones y cárceles para los ineptos y/o corruptos responsables de que en nuestros puertos pasen esas cosas.

Otro periódico tan “creíble” como El Universal, muestra que existe una campaña orquestada para provocar desabastecimiento de gasolina. El Nazional abrió su portada con este titular: “Gasolina de 95 dura 8 horas en estaciones de servicio”. El efecto perseguido por Bobomán es precisamente que se generen compras nerviosas de combustible, que se formen colas en las bombas que, a su vez, generan inquietud y llevan a la gente a meterse en ellas. Es parte de la campaña terrorista de la derecha, que busca salidas diferentes a las elecciones de diciembre. Mientras Miguel Henrique Otero conspira, fiscales sobornados del Ministerio Público engavetan el juicio contra él por enriquecimiento ilícito. 


Familia que roba unida, permanece unida. Los sobrinitos de Tareck el Aissami se transformaron en una plaga para Margarita. Los muchachones controlaban registros y notarías en la isla, pero finalmente los sacaron junto a otros corruptos. Ahora intentan apoderarse de la aduana y ya tienen metido uno de sus cuatro pies en El Guamache.

De vez en cuando, la Guardia Nacional nos da una buena noticia. Un grupo de facinerosos trancó la carretera panamericana a la altura de Miranda (Carabobo) en una de esas guarimbas organizadas por los escuálidos, pero que reclutan a muchos chavistas pendejos. En esta ocasión, y después que esos seres despreciables cerraron el tráfico por ¡6 horas! la GNB decidió intervenir y con lacrimógenos y peinillas reestableció el orden. Lamentablemente no se llevaron a nadie detenido, aunque la Fiscalía sin duda los hubiera liberado en minutos.



Con razón el hampa está desbordada. A pesar de que los fiscales del Ministerio Público están desbordados de trabajo y con frecuencia no presentan cargos, o lo hacen tarde y mal, hasta en casos de homicidio, luego pierden el tiempo en “delitos” ridículos. Una vez más, la Fiscalía imputó y llevó a juicio a una pareja en Cabimas, por el atroz crimen de hacer el amor dentro de un carro. Un bolsa con cargo de fiscal llamado Daniel Alvarado fue el encargado de manejar tan ridículo proceso penal, contra unas personas cuyo delito real es no tener suficiente dinero para dos cosas: pagar un hotel o sobornar policías y fiscales. El Estado gastó mucho dinero, recursos humanos y tiempo en castigar a una pareja y someter al escarnio público a una mujer que, por lo visto, a los ojos de Luisa Ortega Díaz o cualquier mojigato y cursi, cometió un crimen horrendo. No es la primera vez que suceden estupideces así y los ineptos que manejan prensa de la Fiscalía, envían gacetillas a los medios pregonando la incapacidad del organismo en el que trabajan. Todas tienen la misma redacción ampulosa, propia de periodistas mal formados y empiezan con frases altisonantes del tipo “dada la contundencia de las pruebas presentadas por el Ministerio Público...” cada vez que alguien lea algo así en un periódico, sepa que se trata de un palangre, porque, eso sí, los capos de esa dependencia son hábiles para comprar reporteros venales.

En todas partes hay imbéciles. Un carcamal llamado Giorgio Napolitano, presidente de Italia, propone descongestionar las cárceles liberando a los delincuentes, en lugar de construir otras nuevas. En las prisiones italianas caben 47 mil presos, pero en la actualidad hay 64 mil. Esos parásitos politiqueros siempre se van por la vía fácil e inadecuada. La solución no es la que propone esa lacra, que sigue de Presidente porque los partidos no fueron capaces de hallar a otro que reparta el botín con todos. La salida que recomienda Napolitano es indultar y amnistiar a los hampones. Con razón en Italia gobierna la mafia.

Donde llega Estados Unidos, llega también el narcotráfico. En Afganistán, la producción de amapola prácticamente había desaparecido, por la severidad con que se reprimía el narcotráfico. Tras la invasión gringa, ese país volvió a ser el paraíso de la droga, negocio en manos de señores de la guerra locales que trabajan para bandas estadounidenses. Mucho más cerca de nosotros, en Honduras, tras el golpe de Estado que dio EEUU contra Manuel Zelaya, el comercio de estupefacientes vive un auge jamás visto, hasta el punto de que está desplazando a México como centro del comercio ilícito. Ese país se transformó en poco tiempo en el más peligroso de América Latina y el gobierno, en complicidad con la DEA, protege a los grandes carteles y a las maras, que cada día asesinan a decenas de personas en esa pequeña nación. San Pedro Sula, la segunda ciudad hondureña y sede del principal aeropuerto, es la ciudad más peligrosa del mundo. Antes de que Estados Unidos se hiciera con el gobierno de Honduras tras el golpe de Estado que lo transformó de Estado independiente en protectorado gringo, la tasa de homicidios pasó de 37 a 86,5 por cada mil habitantes.


No hay comentarios:

Publicar un comentario