Por Francisco Javier Sierra Corrales
Logró lo que buscaba: “trancar el serrucho”. Ahora viene la militarización
Después
del 8 de octubre, pasado, en Guayana tronó el calipso, a manera de adelanto del
carnaval, puesto que se había interrumpido 20 días de lucha, de asamblea
permanente por parte de los sidoristas, reclamando el pago correcto (Existe un
cálculo chimbo que desmejora el salario integral) de utilidades, vacaciones,
prestaciones, intereses de prestaciones, que por esa vía le escamotean (O le
roban, habrá que averiguar por intermedio de una experticia de contabilidad
forense si no hay balances o cuentas dobles), cantidades individuales
importantes que redundan en millonarias cifras en el total-total; y ese día
tronó el calipso en toda Guayana, porque se había llegado a un acuerdo entre el
mismísimo Presidente de la CVG, General Carlos Osorio y el presidente de la
factoría ferrosa con el sindicato de SIDOR (SUTISS), en donde reconocían que
había que revisar la forma de pago, y si se comprobaba que estaba mal calculada
se subsanaba y se continuaba con la discusión del contrato que hasta ese
momento era una “caja negra” porque nadie conoce el ante-proyecto del contrato
colectivo y se venía discutiendo por parte de la directiva, sobretodo la
tendencia de la burocracia FBT-Maduro-Rangelismo (En Guayana existe el pacto
sindicalismo “oficialista”-empresarios parasitario-CVG-MUD y militares de
derecha), clandestinamente, los trabajadores simplemente eran informados al
leal saber y entender de esa burocracia anti-democrática.
Hasta mi persona cayó
por inocente ese 8-O y escribí varios artículos expresando que había privado la
sensatez y se había derrotado la tendencia fascista dentro del madurismo, que
contradictoriamente la encabeza el sector sindical (Brigada de choque) con el
rangelismo (Empresarios parasitarios locales que también financia la
MUD-Velásquez), la tendencia militarista que quería la salida militar (Y quiere
y está a punto de lograrlo), salida militar, en donde el rangelismo soltaría
dos palomas de un solo jalón, por un lado, extermina un movimiento clasista de
avanzada rebelde que nunca lo ha podido controlar y al mismo tiempo, le hace
perder las elecciones al joven Alcalde de Caroni, José Ramón López que no es ni
de su tendencia ni de su agrado.
Pero la
alegría duró muy poco, en la misma semana del acuerdo, la CVG, a las mesas que
se instalaron casi el mismo día, no mandó a ningún representante importante,
salvo la foto de instalación, pero después fueron despareciendo por la
inasistencia del sector patrón-estado, y empieza otra vez Nicolás Maduro, sin
ton ni son a volver a “echarle tiros” a la dirigencia sindical de SUTISS (Son
“tres sindicalistas”, dice), en las cadenas mediáticas nacionales.
Resulta,
al aparecer, y por lo que dice la dirigencia clasista de SUTISS, el sector de
la FBT (La Central Nacional “Socialista” de Trabajadores) firmó con el General
Carlos Osorio, Presidente de la CVG, una forma de pago que perjudica a los
trabajadores y un contrato colectivo, sin consultarlo con el resto de la
directiva y sobre todo con los trabajadores.
Los
trabajadores al verse burlados y emboscados implementaron acciones de lucha
callejeras, que son acciones legitimas, son consecuencias no causas, producto
que tan ilegitimo e ilegal es burlarse de ellos, ofrecerle un acuerdo, con base en una palabra empeñada, el cual debe ser serio puesto que no son ninguno
“recogiditos” quienes lo efectúan sino, el Presidente de la CVG y el Presidente
de SIDOR, ambos Generales del Ejercito, son personas que comprometen al estado,
aparte de estar el asunto bajo información al Presidente Maduro, en tiempo
real.
POR QUÉ LA BUROCRACIA LE DA UNA PATADA A LA MESA
La
burocracia patea la mesa en SIDOR, porque a raíz del conflicto de los 20 días
que aparentemente cesó el 8-O-2013, quedó muy mal parada, ya que hizo las veces
de esquirol, José Meléndez Secretario de Organización de SUTISS (Con quien
aparentemente se firmaría el cálculo y el contrato, ambos, chimbos),
representante de la FBT-Maduro en SIDOR, con bandas armadas, integrada por
delincuentes sacados de la cárcel de la cárcel de Vista Hermosa y otros que
cometen delitos y no son detenidos, gozan de privilegio, y afecto al rangelismo
(Desde hace rato se viene denunciando esta situación en Guayana que yo la he
denominado “EL paramilitarismo a la Venezolana”, en donde existen centenares de
muertes por sicariatos sindical o no que la administración de justicia penal no
resuelve), intentaron amedrentar a los trabajadores con el fin de “quebrar”
la lucha pero los sidoristas, quien han
madurado bastante, echaron el miedo a la espalda y no se rajaron.
De
haberse llegado a un acuerdo felizmente, como era lo esperado en las mesas de
trabajo acordadas el 8-O-13, el rédito hubiese sido para quien se lo merecía,
para los trabajadores de SIDOR, pero quedaría la FBT reducida a nada en SIDOR;
y esto no lo puede ni tolerar ni permitir la Central “Socialista” y desde
Caracas vino la orden de “dinamitar” las mesas de trabajo; causa de la apertura
de la lucha sidorista, ya en el ámbito callejero.
EL PODER JUDICIAL COMO INSTRUMENTO POLÍTICO PARA QUEBRAR
LAS LUCHAS OBRERAS
Desde
hace rato el poder judicial, el ministerio público, la defensoría del pueblo y
las inspectorías del trabajo han venido siendo factores político de una
tendencia dentro del chavismo (la derecha endógena, la burocracia), expresada
en Guayana en el binomio FBT-rangelismo (Francisco Rangel Gómez Gobernador del
Estado Bolívar), cuya máxima expresión, aparte de la parcialización notoria y
notable a los casos de las luchas obreras que no son de la burocracia, y una de
sus expresiones mas connotadas es lo que se denomina como el “amparo Guayanés”,
así fue bautizado en la lucha de los trabajadores de “Galletera Carabobo” en
Valencia en donde metieron presa por desacato a la dirección sindical; este
amparo que desgraciadamente nació en nuestra zona y es una afrenta para los
abogados bolivarense, es una forma expresa de criminalizar y penalizar las
luchas obreras.
En este
caso concreto como forma de quebrar la lucha de os trabajadores quienes agarraron
calle, han utilizado a un juez civil quien es doblemente incompetente,
incompetente porque no es un caso judicial sino laboral administrativo, ahí ha
debido haber intervenido la Inspectoría del Trabajo de Puerto Ordaz, como
mediadora por ley que es, pero las instrucciones que tiene de Maduro - María Cristina Iglesias (MPPTSS), son que “mire para otro lado”, entonces recurren al
poder judicial y este se presta para ello, con fines de criminalizar la lucha ,
la vez que la quiebran; y en este caso han utilizado a un juez civil que es
incompetente por la materia.
Este
Juez Civil es el mismo que decretó medidas de protección patrimonial para las
supuestas difamaciones que hicieron los medios de comunicación que asumen
independencia en Guayana, que lamentablemente son de la derecha puesto que los
del “proceso” hacen las veces de “gran hermano”, del empresario Yamal Mustafá,
imputado por el caso de corrupción en FERROMINERA, cuyos bienes han sido
embargados preventivamente en base a la ley contra la delincuencia organizada.
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